Tras exponerse en la Biblioteca Pública de Zamora, la exposición “Zamora al límite. Mapas y planos“, organizada por el Ministerio de Defensa, se traslada a la localidad de Carbajales de Alba. Esta exposición tiene por objeto poner en valor el material que albergan los diferentes archivos del Ministerio de Defensa, dándolo a conocer a la población civil, promoviendo de esta manera la cultura de defensa.
“Zamora al límite. Mapas y planos” expone el material que albergan los diferentes archivos del Ministerio de Defensa, organizados por la Subdirección General de Publicaciones y Patrimonio Cultural de este ministerio.
Tras Zamora y Carbajales de Alba, la exposición podrá visitarse en en Alcañices, Puebla de Sanabria o Fermoselle, entre otras localidades. Más adelante tendrá lugar un un congreso sobre cartografía de frontera.
La exposición contiene una representación de los cerca de 200 mapas, planos y croquis de la cartografía histórica hispano-portuguesa referidos a Zamora, distribuidos en 21 paneles. Entre la documentación que producen los tratados de límites se encuentran los mapas que representan la invasión lusa a Carbajales de Alba (1712), en uno de los periodos bélicos en la Raya entre Aliste y Trás-os-Montes, desde la independencia portuguesa en 1640, que se llevaron por delante muchos pueblos, a sus gentes y los archivos.
Las fortificaciones de frontera
El ámbito fronterizo hispano-portugués se vio afectado por los vaivenes tanto de los procesos de enfrentamiento como de acercamiento entre los dos Estados, por ejemplo, desde 1580 cuando Felipe II de España fue nombrado también rey de Portugal y con sus sucesores Felipe III y Felipe IV, (hasta 1640), la delimitación fronteriza se diluyó en función de otras prioridades. En cambio, durante el proceso independentista portugués (siglo XVII) los pueblos adyacentes a dicha frontera fueron sometidos a constantes incursiones y saqueos, como también sucedió durante la llamada Guerra de Sucesión española (1703-1714).
En este contexto, en los siglos XVII y XVIII se levantaron una serie de fortalezas defensivas de la frontera zamorana, ante la necesidad de frenar a los lusos “haciendo plazas de armas fortificaciones y artilladas en los términos de Carbajales, Alcañices y Torregamones, guarneciéndolas con un tercio fijo de 800 hombres”, según las crónicas de la época.
En 1712, cuando los portugueses entraron en Carbajales de Alba llegó a tal el despropósito de los invasores que, tras matar los cerdos de los vecinos, que las familias tenían para la matanza, para chamuscarlos utilizaron los manuscritos que se encontraron en las escribanías carbajalinas.
El Fuerte de San Carlos de Carbajales de Alba constituye un singular ejemplo de este tipo de fortificación. Construido a mediados del siglo XVII por decisión del rey Felipe IV, las instalaciones defensivas del Fuerte de San Carlos de Carbajales se mantuvieron más o menos firmes hasta mediados del siglo XIX acogiendo un pequeño destacamento de militares.
Una frontera cartografiada
La frontera hispano-portuguesa, desde la desembocadura del río Miño hasta la desembocadura del río Guadiana, tiene una longitud de 1.214 km y es la más antigua y una de las más detalladamente definidas de Europa.
El trazado general actual se configura en la Edad Media mediante los tratados de Zamora (1143), Badajoz (1267) y Alcañices (1297). Sin embargo, su delimitación exacta y definitiva se fijó por los tratados de límites firmados entre 1864 y 1926. Los trabajos cartográficos de la línea fronteriza anteriores a la firma del Tratado de Límites de 1864 eran escasos y carecían de detalle y precisión científica. En el siglo XVIII se elaboraron, por parte de los ingenieros militares de ambas naciones, algunos mapas de cierto interés. En España, destacan los trabajos del ingeniero Antonio de Gaver.
Entre la documentación que producen los tratados firmados entre 1864 y 1926 se encuentran los mapas que se presentan en esta exposición y que forman parte de un conjunto de cerca de doscientos mapas, planos y croquis de la cartografía histórica hispano-portuguesa que se conservan en el Archivo Cartográfico y de Estudios Geográficos del Centro Geográfico del Ejército.
La cartografía de la frontera se complementa con planos y mapas de la ciudad de Zamora y otras localidades de la provincia: Benavente, Fermoselle, Carbajales de Alba, Puebla de Sanabria y Toro, procedentes de archivos dependientes del Ministerio de Defensa. Todos ellos, junto con cerca de 40.000 mapas y planos procedentes de distintos centros del Ministerio de Defensa, son accesibles a través de la Biblioteca Virtual de Defensa.