El 19 de marzo se conmemora el Día Internacional del Artesano. El artesano trabaja con sus manos, creando obras únicas sin apenas intervención de maquinaria. Hasta hace pocos decenios, se encontraban artesanos en cualquier punto geográfico y en todos los campos de producción. Sin embargo, los procesos de industrialización y la implantación de la sociedad de consumo han provocado un descenso del número de artesanos y de la actividad en sí. Particulares e instituciones buscan hoy revitalizar la artesanía, proyectarla como un gran sector moderno y dinámico que crea empleo y riqueza en la sociedad del siglo XXI
No dia 19 de março, comemora-se o Dia Mundial do Artesão. A efeméride tem a sua origem na celebração do Dia de São José, padroeiro dos artesãos, e que se assinala também no dia 19.
La actividad artesanal ocupa en Castilla y León y Portugal a un importante sector de la población, en buena parte asentado en núcleos rurales. El valor de la actividad artesanal no se limita solo a la generación de empleo; desempeña, además, una importante función: preservar y transmitir las tradiciones y el legado cultural de nuestras regiones, engrandeciendo el patrimonio inmaterial de la humanidad.
El sector artesano en España
Según el estudio “Situación de la artesanía en España. Informe de competitividad y principales variables económicas” del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo (2015), la artesanía en España es un sector productivo formado por más de 38.000 empresas, que da trabajo a 125.000 personas y cuyo PIB asciende a unos 4.042 millones de euros. El 97% de estas empresas son microempresas, que agrupan al 75% de los artesanos del país; el resto, cuenta con 10 o más personas empleadas.
El empleo directo de las empresas artesanas representa en España el 4,3% del total del empleo industrial y el 0,6% del empleo del conjunto de la economía. El sector artesano español representa en torno al 2,4% del PIB industrial y un 0,4% del PIB total.
La artesanía se ha considerado tradicionalmente como un elemento de identidad colectiva y de conservación del patrimonio cultural y etnográfico. Hoy, se valora también muy positivamente su aportación a la economía. Esta mayor visibilidad de la dimensión económica de la artesanía muestra sus grandes posibilidades de crecimiento a través del desarrollo de la competitividad e innovación de las empresas artesanas, cuyos pilares fundamentales son el diseño y una adecuada gestión empresarial.
En Castilla y León, el sector artesanal es especialmente relevante, puesto que genera unos 6.000 empleos directos. La artesanía tiene, además, una importante dimensión social y cultural, especialmente en el medio rural, pues contribuye al asentamiento de artesanos y talleres, al dinamismo cultural y a la promoción turística.
Entidades como FOACAL (Federación de Organizaciones Artesanas de Castilla y León) y CEARCAL (Centro Regional de Artesanía de Castilla y León), trabajan en la región para ofrecer formación continua (carpintería, cerámica, caligrafía, talla, grabado, cestería, vidrio, restauración, marroquinería, …) y mostrar la nueva realidad de las empresas artesanas, proyectando la artesanía como un gran sector que crea empleo y riqueza en la sociedad del siglo XXI.
Fruto de la colaboración de la Junta de Castilla y León con el sector artesano regional es la campaña Artesanía CyL-Patrimonio Vivo, en la que los artesanos de Castilla y León muestran su lado más innovador, vanguardista y de diseño.
La Junta de Castilla y León ultima, además, una nueva regulación del sector, que unificará en una única norma la actual dispersión normativa. Además, introducirá algunas modificaciones para adaptarse a la situación actual del sector, recogiendo los cambios producidos en los últimos años como consecuencia de la aparición de nuevas herramientas digitales, materiales y hábitos de consumo. El nuevo decreto incidirá en la profesionalización del sector, el reconocimiento de la condición de artesano y de taller artesano, y dará cabida a nuevas actividades artesanas, eliminando posibles restricciones de acceso para aquellas actividades que, por su novedad en los procesos y materiales productivos, se ven excluidas del repertorio actual.
La artesanía en Portugal
En la década de 1980, se produce en Portugal un punto de inflexión para el reconocimiento formal de la artesanía como sector de actividad económica. Las actividades artesanales estaban tradicionalmente asociadas al discurso cultural y simbólico de los objetos, al fomento de su estudio y conservación. Sin embargo, la puesta en marcha de programas europeos, junto con la primera iniciativa legislativa portuguesa para delimitar el concepto de artesano y de artesanía (Portaria nº 1099/80, de 29 de Dezembro), contribuyó al despegue del sector como tractor económico de las comunidades locales, además de su apreciación como bien patrimonial cultural, fortalecedor de la identidad colectiva de las comunidades.
A mitad de la década de 1990, el sector se organiza en Portugal. Se crea el PPART Programa para a Promoção dos Ofícios e das Microempresas Artesanais (Resolução de Conselho de Ministros nº136/97, de 14 de Agosto), y se define una base legal para el sector (Decreto-Lei nº 41/2001, de 9 de Fevereiro, actualización Decreto-Lei nº 110/2002, de 16 de Abril). Se identifica a los artesanos y las actividades artesanales, se definen políticas de incentivos para el sector, se reconocen las artes y oficios como reservorio de importantes valores culturales, pero también como instrumento de dinamización de la economía, el turismo y el empleo local.
A ello contribuye la creación de una serie de entidades, organismos y asociaciones, creadas en ese periodo, que aún hoy desempeñan un papel crucial para la promoción y el desarrollo del sector artesanal en Portugal. Por ejemplo, el IEFP, Instituto do Emprego e Formação Profissional, IP (1979) o CEARTE, Centro de Formação Profissional do Artesanato (1986). Este último, surgido por protocolo con el 1986 por protocolo entre el IEFP y Cáritas Diocesana de Coimbra, es hoy uno de los principales recursos existentes, a nivel nacional, para la cualificación, perfeccionamiento y desarrollo de los profesionales del sector, promoviendo más de 300 acciones formativas al año que llegan a más de 4.000 formandos. Cerámica, vidrio, azulejo, moda, tejido, costura, encuadernación, … Son cursos de corta duración (entre 50 a 200 horas) con un fuerte componente tecnológico, orientados a aquellos que pretenden ejercer una actividad autónoma, que se traduce en emprendimiento cualificado y creativo.
Según datos del IEFP (2013), Portugal contabiliza 2.200 artesanos (62% de ellos, mujeres) y 2.000 unidades productivas artesanales. El textil acapara el 27% de la actividad artesanal, seguido de la cerámica, que representa el 15%. Ejemplos de la artesanía textil lusa son los tapices de Portalegre y las colchas de Castelo Branco.
En el actual contexto nacional, la artesanía lusa se relaciona con la entrada de nuevos actores y de nuevas áreas de expresión y de creación cultural y artística, reformulando la imagen del sector en tanto expresión cultural contemporánea. Se asiste a un aumento en el número de jóvenes artesanos, urbanos, y con niveles crecientes de educación formal en áreas artísticas y creativas, especialmente en los dominios del diseño, las artes plásticas, las nuevas tecnologías, la gestión y el márketing. Estos nuevos artesanos conciben las artes y oficios como un proyecto profesional y de calidad.
Barcelos é a única cidade portuguesa que integra a Rede de Cidades Criativas da UNESCO na área do Artesanato e Artes Populares, e das poucas no mundo que aposta neste setor, nas suas produções e nos seus artesãos como estratégia de promoção e valorização territorial.
Otros movimientos, sin embargo, están ligados al mundo rural. En el Centro de Portugal, destacan la Associação de Artesãos Serra da Estrela (cuyo trabajo puede seguirse en una serie de vídeos en el canal Espacio Fronteira) la red de Aldeias do Xisto engloba a 27 aldeas de 16 concelhos entre Castelo Branco y Coimbra. Estas aldeas, algunas a punto de desaparecer, lograron atraer a personas creativas interesadas en la concepción y producción de piezas artesanales. En estas aldeas se divulga y afirma hoy la artesanía portuguesa, se realizan cursos y talleres de perfeccionamiento de técnicas de producción artesanal que se creían perdidas. La artesanía constituye un factor clave para abrir la región al mundo (por ejemplo, a través del turismo), constituyendo un importante activo en el desarrollo del territorio.
La artesanía en Espacio Fronteira
Entre el día 19 de marzo (Día Internacional del Artesano) y los días 6 a 11 de abril (Días Europeos de la Artesanía), el canal Espacio Fronteira proyectará una serie de vídeos de oficios artesanos en el Centro de Portugal (por cortesía de la Associação de Artesãos Serra da Estrela) y en Castilla y León (por iniciativa del Centro Regional de Artesanía de Castilla y León (CEARCAL) y de la Junta de Castilla y León), con apoyo del programa Interreg.
IMAGEN: CEARCAL- Centro Regional de Artesanía de Castilla y León