Se cuenta que su amigo José Regio había quedado una tarde con Pessoa y éste apareció, como de costumbre con algunas horas de retraso, declarando ser Álvaro de Campos y disculpando a Fernando por no haber podido acudir a la cita. Poeta taciturno, solitario, extravagante, bebedor, con su eterno cigarrillo en la boca, sus gafas redondas, su bigote sempiterno, aficionado al mundo esotérico y muy reservado incluso en sus relaciones amorosas.
En una de sus cartas, su amada Ofelia Queiroz no sabe muy bien sus intenciones para con ella: “¿Me has dicho alguna vez qué es lo que piensas realmente, ¿qué quieres hacer conmigo? No, no sé nada. Sólo sé que te amo y nada más. Pero eso no basta. Estoy completamente entregada a mi Fernandinho. ¿Qué recompensa tendré? Te seré clara. Temo que tus efluvios de amor terminen pronto. Temo que me digas, amor mío, que tengo razón al pensar así. ¿Tendré de ti la recompensa que merezco? Temo que no la tendré, dado que nunca me has hablado de ello”. Ofelia Queiroz creó un nuevo heterónimo para Pessoa: Ferdinand Personne. En portugués el apellido Pessoa significa “persona”.
Pessoa vivió más de una vida. Llegó a tener 72 heterónimos o personalidades fingidas para escribir sus obras, aunque los cuatro más conocidos eran Ricardo Reis, Alberto Caeiro, Álvaro de Campos y Bernardo Soares.
Jesús Callejo (Cadena SER Historia)
Conoció al mago Aleister Crowley que llegó a Lisboa en 1930 no sólo para simular su suicidio en el acantilado La Boca del Infierno, cerca de Cascais, tras algunos problemas económicos y sentimentales, sino para conocer al portugués que le había escrito en inglés varias cartas corrigiéndole su carta astrológica. Descubrió que era fundador de revistas de vanguardia, con una extensa obra poética casi secreta, y famoso por su naturaleza huidiza a pesar de contar con un trabajo rutinario como traductor de correspondencia en una oficina comercial. Como atestigua el estudioso y astrólogo portugués Paulo Cardoso, hay al menos 2.000 textos sobre tema de astrología, así como 318 cartas astrales a personalidades del mundo de la política (Napoleón), la ciencia (Pasteur), la música (Wagner) y la literatura (Oscar Wilde), con sus posiciones planetarias y estelares, horarios, fechas, efemérides y otras variables. También se sabe que Pessoa elaboró cada una de sus personalidades literarias autónomas diseñadas en concordancia con detallados horóscopos de su vida y su muerte. Bajo la pluma de Rafael Baldaya, otro de sus heterónimos, se halla un tratado sobre la materia de los astros y otro llamado ”Principios de Metafísica Esotérica”.
“No sé qué me traerá el mañana”
Su última frase escrita a lápiz, y en inglés, data del 26 de noviembre: “No sé qué me traerá el mañana”. Fue premonitoria. El 30 de noviembre de 1935 muere en el Hospital de São Luís dos Franceses, en Lisboa, víctima de un cólico hepático a consecuencia de la bebida. Tenía 47 años. El parte de defunción de Pessoa indica como causa del fallecimiento “bloqueo intestinal”. Realmente, toda su vida fue un bloqueo sentimental y emocional que le impidió ser feliz junto con las personas que más amaba. Una vez muerto, su obra y su fama florecieron.
Se depois de eu morrer, quiserem escrever a minha biografia, não há nada mais simples. Tenho só duas datas: a da minha nascença e a da minha morte.
Entre uma e outra cousa todos os dias são meus.
Alberto Caeiro, “Poemas Inconjuntos”
Heterónimo de Fernando Pessoa
El 5 de mayo es el Día Mundial de la Lengua Portuguesa. La decisión fue anunciada en 2019 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, UNESCO. Los países que integran la Comunidade dos Países de Língua Portuguesa (CPLP) confían en que este apoyo aumente el interés por el idioma en áreas no lusófonas, y crezca el poder de influencia del portugués y los países de habla portuguesa en la escena internacional.
PUBLICACIÓN ORIGINAL de Jesús Callejo para Cadena SER Historia
IMAGEN: Instituto Ling