Ciudad Rodrigo ha acogido el torneo hispano-portugués de fútbol sala organizado por la Real Federación de Castilla y León de Fútbol y las Asociaciones portuguesas de fútbol de Guarda y Bragança. Se ha disputado durante la jornada del 2 de julio en el pabellón municipal Eladio Jiménez.
En este torneo se han dado cita un total de ocho equipos, cuatro de categoría alevín y cuatro de categoría infantil. En la primera de ellas, fueron de la partida las selecciones de Castilla y León, Guarda y Bragança, junto al III Columnas como conjunto anfitrión. Mientras, en categoría infantil, disputaron el torneo las selecciones de Guarda y Bragança, Inter Sala y el III Columnas.
Portugal y España, potencias mundiales
El fútbol sala, también conocido como fútbol de salón, futsal o microfútbol, nació en 1930 en Montevideo (Uruguay), al llevar la práctica del fútbol a escenarios cerrados. En la década de 1970 llega a Europa, y cala hondo en España, donde alcanza popularidad y gana patrocinios hasta lograr crear la liga profesional de fútbol sala en 1989. Un año después, se crea el Campeonato Nacional de Futsal en Portugal. Este hecho llevó a un crecimiento significativo del futbol sala en toda la península Ibérica.
Más allá de la competición oficial y profesional, este deporte ha calado también en los patios de recreo de los colegios y los polideportivos ibéricos. En ellos juegan un buen número de niños, que tienen contacto con esta disciplina deportiva mucho antes de disputar algún minuto en el fútbol-11, como sucede con las grandes figuras del balón en Sudamérica.
Portugal y España son superpotencias del fútbol sala mundial. Entre ambas se disputan el trono de los últimos Campeonatos Mundiales de Futsal FIFA y del campeonato UEFA de Fútbol Sala.
El fútbol sala concita cada fin de semana a miles de equipos repartidos por toda la geografía ibérica dando igual la categoría o nivel. Los respectivos equipos nacionales no le van a la zaga en popularidad y buenos resultados. El fútbol sala está de moda desde hace mucho tiempo. España ha logrado once medallas consecutivas en Europeos, no se ha bajado del podio desde que en 1996 se disputara el primer europeo. ¿El rival a batir en la final? Casi siempre, Portugal. El fútbol sala es el deporte ibérico por excelencia.
CON INFORMACIÓN E IMAGEN DE David Rodríguez para salamancartvaldia.es