El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) confirma su compromiso con el desarrollo del Corredor Atlántico a su paso por Castilla y León, una comunidad autónoma clave para que la infraestructura alcance todo su potencial, ayudando a vertebrar el país, a conectar España con Portugal, Francia y el resto de Europa y a impulsar el tráfico ferroviario de mercancías.
En un acto celebrado en Valladolid el pasado 20 de marzo, ante unos 170 representantes de la sociedad civil y de diversas administraciones públicas locales y regionales, se han presentado la situación y los objetivos del Corredor Atlántico a su paso por Castilla y León.
“El Corredor Atlántico es una infraestructura que beneficia a todos. Tanto a las regiones que atraviesa, como a las que se conectan a ella a través de otras vías, como al sector empresarial y a los ciudadanos, ya que permitirá mejorar la conectividad nacional e internacional, generará oportunidades de negocio y ayudará a incrementar el tráfico ferroviario de mercancías, contribuyendo a reducir las emisiones de CO2”.
Xavier Flores, secretario general de Infraestructuras del Mitma
Dentro del papel prioritario de Castilla y León en el despliegue del Eje Atlántico, el objetivo del Mitma es movilizar más de 1.500 millones de euros en la región entre proyectos licitados y ejecutados en el marco del Corredor Atlántico. Entre otros proyectos, la conexión con Portugal a través de Salamanca, para lo que ya están en marcha los trabajos de electrificación a 25 kV CA de los 125 kilómetros entre Salamanca y la frontera en Fuentes de Oñoro/Vilar Formoso.
Sin embargo, el documento presentado aleja a Zamora de tres de las principales líneas estratégicas del transporte ferroviario. Por un lado, no habilita transporte de mercancías ni por la capital y por Benavente, ciudades ambas aisladas de las redes principales. Además, deja el AVE entre Olmedo y Zamora con vía única (aunque sí completa con doble tramo entre Zamora y Orense). Por último, no contempla la opción de entrada a Portugal por Zamora, sino solo por Salamanca.
En el mapa de mercancías, las conexiones ferroviarias dejan a Zamora y Benavente como una “isla”, pues localiza las terminales intermodales y logísticas en Valladolid, León, Burgos, Salamanca o Miranda de Ebro, pero no en el principal nudo de comunicaciones de Zamora, en Benavente. La idea que lidera Braganza para una posible conexión directa de Oporto con Zamora, que es la distancia más cercana entre la alta velocidad ferroviaria lusa y española, ni siquiera aparece dibujada en los mapas, como tampoco figura referencia alguna a la Ruta de la Plata.
Corredor Atlántico
El Corredor Atlántico es la conexión multimodal que conecta Portugal, España, Francia, Alemania e Irlanda y da servicios a personas y mercancías, por lo que es clave para el desarrollo logístico y la conexión de nodos urbanos. Está compuesto por los diferentes modos de transporte: carretera, ferrocarril, portuario, aéreo, fluvial y multimodal por lo que, además de las rutas ferroviarias y viarias, incluye los puertos, aeropuertos, estaciones intermodales y ciudades más importantes.
A su paso por España, el Corredor Atlántico comprende once Comunidades Autónomas (Asturias, Galicia, Castilla y León, País Vasco, Navarra, Aragón, Extremadura, Madrid, Castilla La Macha, Andalucía y Canarias), y en su trayecto ferroviario incorpora más de 5.300 km, según la última propuesta de ampliación.
El Corredor conecta Portugal con el resto de Europa, a través de España. Los pasos fronterizos son fundamentales para la consecución de una red europea.
Así, su desarrollo, tiene y tendrá un impacto directo sobre las once autonomías, que representan a más del 65% de la población española. Analizado a través un prisma económico, el Corredor Atlántico atraviesa y viene a impulsar Comunidades Autónomas que generan actualmente en torno a 778.000 millones de euros del Producto Interior Bruto (PIB) español.
CON INFORMACIÓN E IMAGEN DE mitma.gov.es